Un grupo de 77 organizaciones ambientales chilenas publicaron este jueves una carta abierta donde critican la estrategia de hidrógeno verde del gobierno de Gabriel Boric.
Su principal reclamo es que tal estrategia resalta las bondades de la conversión energética, pero omite «de manera
manifiesta los potenciales impactos socioambientales en los territorios».
Este modelo, vendría desde su perspectiva «a perpetuar la distribución desproporcionada entre cargas y
beneficios socioambientales, traspasando las externalidades negativas directamente a los territorios donde se concentrarían los proyectos de generación y exportación. En otras palabras, el desarrollo del hidrógeno, tal como está propuesto, profundiza escenarios de injusticia ambiental, y consecuencialmente de conflictos socioambientales y judicialización.
Suscrita por organizaciones de base y ONGs como Ecosistemas, Terram, Chile Sustentale y Greenpece, la declaración pública dice lo siguiente:
Durante los últimos años hemos visto cómo desde el gobierno y el sector privado se ha impulsado la agenda del ‘hidrógeno verde’, como una bala de plata en materia de desarrollo nacional y descarbonización global, esperando situar a Chile como líder en materia de acción climática y transición energética. La ambiciosa meta planteada por los gobiernos es convertirnos en líder y productor global de H2V por electrólisis al 2030.
Actualmente la agenda del hidrógeno está siendo encabezada por los ministerios de
Energía, Economía y Hacienda, bajo el argumento de cumplir con los compromisos
climáticos y catalizar la economía del país, lo que ha conllevado a comprometer desde
el nivel central y entre cuatro paredes a las regiones de Antofagasta y Magallanes
como los próximos “campeones del hidrógeno verde”, dejando atrás toda promesa de
descentralización energética contenida en la Política Energética 2050.
En el último tiempo se han exhibido latamente los potenciales beneficios del
desarrollo de dicha industria, sin colocar sobre mesa la problematización que significa
para los territorios en donde pretende establecerse, por ende se ha omitido de manera
manifiesta los potenciales impactos socioambientales en los territorios que
concentrarían dicha infraestructura para “ayudar a la autonomía estratégica europea”,
tal como señaló el viernes 14 de julio el presidente del gobierno de España, con motivo
de la gira que realiza en Europa el presidente Gabriel Boric.
La gran escala de esta industria, involucra miles de kilómetros cuadrados de
gigantescos aerogeneradores y parques fotovoltaicos, desalinizadoras de agua y
plantas de hidrólisis, construcción de puertos, plataformas, caminos, líneas de alta
tensión y barcos cargados de amoníaco navegando en costas y bahías. Lo anterior
conformaría la nueva fisonomía de aquellas regiones ungidas como polos de
desarrollo del H2V, afectando gravemente la biodiversidad y los estilos de vida de
quienes habitan el territorio.
Así, siguiendo la misma línea de la Estrategia Nacional de Hidrógeno Verde propuesta
por el ex presidente Sebastián Piñera, el gobierno actual sin ningún cuestionamiento,
ha hecho suyas las metas y objetivos de dicha política. Para ello, el gobierno se ha
concentrado en impulsar esta estrategia en la cual pareciera buscar elevar su alicaído
capital político, ya que ha movilizado todos los recursos disponibles, con el fin de
establecer una serie de “condiciones habilitantes para el desarrollo de dicha industria:
financiamiento internacional, oferta de uso de suelo e incentivo a la inversión de
manera gratuita a través del concesiones de terrenos fiscales e incluso se ha adquirido
deuda pública para el beneficio de un negocio 100% privado”.
El modelo de desarrollo de hidrógeno verde impulsado por el gobierno que estamos
cuestionando, viene a perpetuar la distribución desproporcionada entre cargas y
beneficios socioambientales, traspasando las externalidades negativas directamente a
los territorios donde se concentrarían los proyectos de generación y exportación. En
otras palabras, el desarrollo del hidrógeno, tal como está propuesto, profundiza
escenarios de injusticia ambiental, y consecuencialmente de conflictos
socioambientales y judicialización.
Las fallas del modelo propuesto involucra problemas tanto de forma como de fondo.
Lo anterior se hace evidente en la narrativa propuesta por la supuesta “transición
energética justa”, la que lamentablemente no ha significado un reforzamiento en las
verdaderas condiciones para el resguardo de los territorios: participación
debidamente informada, regulación ambiental robusta; líneas de base públicas;
ordenamiento territorial; acceso a la información, transparencia y rendición de
cuentas o asociatividad.
Por otro lado, si el objetivo es lograr una transición energética justa, no podemos
ignorar la necesidad de reducir las brechas de pobreza energética a nivel nacional, así
como avanzar en materia de descentralización y generación distribuida para asegurar
mejores niveles de seguridad energética a lo largo del país, como también ocuparse de
la protección de los ecosistemas claves para la adaptación y el “desarrollo de
soluciones basadas en la naturaleza”, como nuestras costas, bosques, humedales, y
tantos otros claves para la subsistencia de nuestra biodiversidad.
Es por ello que nos parece necesario como compromiso del gobierno con el resguardo
de las comunidades y el medio ambiente, que someta el Plan de Acción de Hidrógeno
Verde a Evaluación Ambiental Estratégica (EAE), con el fin de identificar y hacerse
cargo, de forma integral, de los potenciales riesgos socioambientales de la
implementación de esta industria, como también que se incorpore un enfoque de
derechos humanos en la búsqueda de resguardarlos de forma íntegra, aplicando los
compromisos internacionales como por ejemplo el Acuerdo de Escazú.
Las personas y organizaciones firmantes emplazamos al gobierno a que haga un
esfuerzo en enmendar el rumbo de manera urgente, ratificando nuestra convicción de
que las medidas propuestas son posibles y necesarias, y que son la única vía para
posicionar a nuestro país como un verdadero líder en materia de acción climática y
transición energética justa.
ORGANIZACIONES QUE ADHIEREN:
Agrupación Ecológica CHADENATUR
Agrupación de carácter indígena Chango Tierra del Sol, Hornitos
Agrupación Socioambiental y Cultural Salvemos La Señoraza
Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA)
Catemu en Movimiento
Centro Ecoceanos
Centro de Análisis Socioambiental (CASA)
Centro de Estudio y Conservación del Patrimonio Natural (CECPAN)
Centro de Rehabilitación de Aves Leñadura
Centro general de padres y apoderados Escuela Básica Ñipas Ranquil
Chile Sin Ecocidio
CODEFF (Comité Nacional pro Defensa de la Fauna y Flora)
Cosoc Cupemchi Araucanía
Colectiva Hidrofeminista La Gota Negra
Comité Ambiental Comunal El Quisco
Comité Ambiental Comunal La Reina
Comite Rural de Adelanto el Maggi
Comunidad El Ciruelo Sur
Comunidad Indigena Diaguita Punta de Lobo
Comunidad Kawesqar At’ap
Comunidad Kawesqar Grupos Familiares Nomades del Mar
Consejo de defensa de Los Queñes
Consultora Ambyter
Corporación Ambiental La boca del Aconcagua
Corporación Camino a Farellones
Corporación Defensa de la Cuenca del Maipo
Corporación Privada para el Desarrollo de Aysén (CODESA)
Etica en los Bosques
Fundación Acue
Fundación Arista Social
Fundación Chile Sustentable
Fundación Ciudadanos y Clima
Fundación Conservación Marina
Fundación Ecosur
Fundación Endémica
Fundación Ojos de Mar
Fundación Origen
Fundación Terram
Fundación Territorios Colectivos
Greenpeace en Chile
Instituto Maíra
Junta de Vecinos Casas de Renaico
Junta de Vecinos Las Varas
Junta de Vecinos Talla
Kamayas
Kintu
MODATIMA
Movimiento Ciudadano Salto del Laja
Movimiento NO + Anglo
Mujeres de Zona de Sacrificio en Resistencia
Mujeres en Resistencia Chile
No Alto Maipo
Observatorio Ciudadano
Oikonciencia Consultora Ambiental
ONG Ecosistemas
ONG Elquiverde
ONG Investiga Colina
ONG FIMA
ONG Sustentarse
ONG WE KIMUN
Panel Ciudadano de Hidrógeno en Magallanes
Plataforma Internacional Contra la Impunidad
Red Austral de Acción Territorial (Red AAT)
Red Ecofeminista por la Transición Energética
Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre
Red Plurinacional de Humedales Chile
Resistencia Socioambiental Quilicura
Salvemos Olmué
San Antonio Ambiental
Territorios Democráticos
Torres del Paine Legacy Fund